Tienes derecho a sentirte TRISTE, esa situación te ha creado muchos problemas en las áreas de tu vida y te ha hecho daño. Es normal que tengas ganas de llorar cuando no sabes cómo resolver esa situación, no entiendes que es lo que ocurre y por qué a ti.
Es normal que sientas RABIA, qué te enfade todo por lo que estás pasando. Los desprecios, humillaciones, críticas te generen frustración, decepción e impotencia.
MIEDO a lo que te enfrentas y no sabes cómo. Miedo al futuro ¿lo superaremos? ¿volverá a ocurrirnos en otro sitio? Preguntas que os hacéis y lo verbalizáis en sesión. En la mayoría el miedo provoca bloqueo generando una indefensión que hay que romper para poder afrontar la situación tan difícil que se vive.
La CULPA has llegado a creer las acusaciones de tú acosador y las has hecho tuyas. Reiteradamente te ha achacado negligencia en tú trabajo, poca dedicación, ser el culpable de todo lo malo que ocurre además lo ha difundido y como buen manipulador que es, ha conseguido que algunos le crean por lo que todo ello nos desgasta y daña de manera importante vuestra autoestima. Muchos sentís la culpa cuando creéis que deberíais haber hecho algo o no hecho y lo realizasteis o no. Si aprendemos a no sentir culpa negativa nuestra conducta y nuestros sentimientos mejoraran.
VERGÜENZA del trato reiterado que vives donde te juzgan, critican, humillan, incorporando esos mensajes negativos que recibes dándote ese valor negativo a ti mismo. Tienes que sentir que tus emociones y necesidades son importantes siendo normal sentirte cómo te sientes.
Fundamental en el proceso de recuperación de una víctima de acoso laboral trabajar en la desactivación de las emociones interiorizadas a raíz de la situación laboral vivida.
SÓLO ES DIFÍCIL SALIR, TE ACOMPAÑO EN TU PROCESO DE RECUPERACIÓN A DESACTIVARLAS.